Luis Andaur: "La bicicleta es mi segundo amor. Me ha acompañado siempre"

El actual conductor del programa "Bicitantes" de Mega y fiel amante del ciclismo aventura dijo, también, que guarda grandes recuerdos de su niñez en la Región, específicamente del balneario de Guanaqueros, donde señaló haber pasado los mejores momentos de esta etapa de su vida.
miércoles 15 de febrero de 2017

Siempre acompañado de su bicicleta, Luis Andaur visitó La Serena para conocer a sus fanáticos que lo esperaban en la tienda Oxford, marca que lo ha acompañado desde sus primeros pedaleos extremos. El periodista, viajero y aventurero, se encuentra recuperándose todavía de la fuerte trombosis que sufrió el año pasado mientras “pichangueaba” con sus amigos, donde un desafortunado “trancazo” lo dejó, no solamente con fractura de tibia y peroné, sino que con riesgo vital. Cuando la noticia de su accidente dio vuelta al país, fue difícil de creer: el hombre que había besado serpientes y compartido con reptiles tan peligrosos como los cocodrilos, que incluso había sobrevivido a la mordedura mortal de una cascabel, se debatía entre la vida y la muerte, por algo tan común como un partido de fútbol. No era el mejor final para una vida tan intensa.

Andaur, siempre fuerte, ganó la batalla y se puso de pie, a la espera de nuevas aventuras junto a su bicicleta, la que define como su mejor y más fiel amiga y la memoria de su perro Tambor, cuya alma continúa aún corriendo raudamente, persiguiendo la huella de sus ruedas.

-¿Cómo nació tu interés por la naturaleza y los deportes?

“Me viene desde niño. En mi casa son todos de números y por algún motivo saqué el gen de la aventura. Desde el colegio que me interesan estos temas. Cuando salíamos de paseo de curso, yo siempre me separaba de mi grupo a ver los animales. Es algo que llevo conmigo desde siempre”.

-¿Cómo llegaste a la televisión?

“Yo estudié periodismo y debía hacer mi práctica. Me la ofrecieron en el programa Extrajóvenes de Chilevisión. Así que me fui para allá y empecé a hacer carrera. Yo ya había estado en otros programas, pero solamente como invitado. Así fijo, con carrera y contratado por un canal, fue en el año 2000 en Chilevisión”.

-¿Cuál ha sido la experiencia más difícil de tu carrera?

“Fue ahora con un accidente que tuve en el pie jugando fútbol. Terminé con una fractura de tibia y peroné. Llegué a estar con riesgo vital con una trombosis. Ya si me dices en los viajes, el único problema grave que tuve fue con la mordida de una serpiente cascabel en un dedo, que requirió antídoto”.

INFANCIA EN LA REGIÓN

-¿Cuál es tu nexo con Guanaqueros?

"Voy para desde niño. En el año 1970 fue la primera vez que lo visité. En ese tiempo había un camping y pocas casas. Yo creo que me enamoré de las playas y de las amistades que hice ahí. El mar es rico, conozco a los pescadores y hay mucha fauna interesante, como ballenas y delfines nariz de botella. Es como si fuese un guanaquerino más. Cuando voy para allá no voy a hoteles, sino que a un camping. Eso me permite conectarme más con él".

BITÁCORA DE VIAJE

-¿Cómo decidiste recorrer el mundo de esta forma tan particular?

“Lo quise hacer así porque la bicicleta era un vehículo poco contaminante, limpio, beneficioso para la salud, que aporta mucho ejercicio físico y permite ahorrar dinero. Esta onda yo la agarré cuando estudiaba. Me iba a la universidad todos los días en bicicleta, me ahorraba harto dinero y lo juntaba para poder viajar, sin que nadie me regalara nada. Después llegué a Oxford batiendo varios récords mundiales en mi bicicleta, como haber subido solo el monte Aconcagua en 1991, el que repetí en 1997. El auspicio me hizo mucho más fácil poder viajar. También escalé las diez cumbres más grandes de América en bicicleta. Todo esto fue un llamado de atención muy fuerte, la gente se empezó a preguntar quién era este loco que andaba en bicicleta, arriesgando todo en lugares tan extremos. Me di cuenta que todo se puede lograr. Nunca hay que ponerse trabas. Hay que atreverse no más”.

- ¿Cuántos países has visitado?

“Treinta y seis. No son muchos. Una cosa es visitar un país y otra es conocerlo. En mi caso, cuando estoy en un país, procuro recorrerlo y ahí recién puedo integrarlo realmente en mi lista. Estar en el aeropuerto o en una sola ciudad de un país, no es conocerlo. Por lo tanto, son 36, pero si me preguntas en cuántos he estado, son unas 80 naciones”.

-¿Cuál es el que más te gusta?

“Tengo dos rankings. Uno de ellos es Chile, por sus paisajes solamente, no tiene muchos animales. Sin embargo, en cuanto a cultura, animales y diferencias con nosotros, más exótico, es India. Es un país muy especial: lo amas o lo odias, así de simple”.

-¿Y el que menos?

“En realidad, no hay país que no me guste. Todos tienen su belleza, pero lo que no niego es que me desagradan aquellos donde es difícil entrar, esos que ponen muchos trámites para obtener la visa. Generalmente, son países en conflicto,  como las naciones musulmanas, que son muy estrictos y extraños en sus leyes”.

NO ME VEO SIN MI BICICLETA

-¿Te ves haciendo otra cosa?

“La verdad no. Me gusta lo que hago y nunca voy a cambiar este sistema de vida. Aunque no estuviera en televisión, estaría igual recorriendo el mundo con mi bicicleta y mi carpa. No me veo en una oficina”.

-¿Qué le recomendarías a quienes desean vivir tus mismas aventuras?

“Eso es lo que siempre he querido inculcar a la gente, que cambiemos el switch. Aunque tengas un trabajo de oficina, dedica tu tiempo libre a recorrer Chile o el mundo, a vivir experiencias. Obviamente, siempre arriba de una bicicleta”.

-¿Te falta algo por hacer en tu carrera?

“Sí, me falta visitar los polos norte y sur. Conocer los osos polares, que me encantan y no he podido visitarlos por un tema práctico. Tengo que tratar de hacer lo máximo con el presupuesto que dispongo. Cuando vas a lugares muy caros, dispones de un solo paisaje, o sea, grabaste al oso polar y ahí te quedaste, gastando el dinero con el que pudiste haber recorrido cuatro países. También me falta Australia y Rusia”.

-¿Qué significa tu bicicleta para tí?

“Es como mi segundo amor. Es la que me ha acompañado siempre. Me falta dormir al lado de ella solamente. Es un fetiche, es mi forma de ser, mi modo de vida y nunca jamás la voy a dejar. Aunque estoy lesionado igual salgo a andar en bicicleta. Fue lo primero que hice cuando desperté de la operación. Ni siquiera caminar. Ha sido mi terapia, porque me ha ayudado a sanar más rápido”.

LA NATURALEZA NO ES MODA

-¿Qué piensas del interés que han despertado los programas de viajes?

“Sobre este tema tengo dos visiones: me gusta, siento que es un aporte y si hay competencia es porque la gente lo está viendo. Significa que hay demanda. Por otra parte, lo que me desagrada es que esto se transforme en una moda, que solamente les importe entregar algo que marque y pongan a cualquier tipo, que no tenga idea, a cubrir cosas, siendo que ahora hay tanto talento y gente que lo puede hacer mejor. Sin embargo, vemos las sillitas musicales de los mismos personajes haciendo lo mismo de siempre. Por eso lo veo por ambos lados: es un tremendo aporte a la cultura pero me gustaría ver personas realmente comprometidas, con currículum, que realmente lo hagan por amor a la naturaleza y no por moda”.

-¿Qué piensas de aquéllos que no tienen consciencia con el medioambiente?

“Esta poca preocupación se ve por un tema de cultura y educación. Más allá que critiquemos u objetemos la conducta de la gente que no está ni ahí, porque yo he visto tipos que fuman y botan las colillas por ahí, que llegan y tiran papeles o son cochinos y dejan basura en la playa, siento que la idea es educarlos para que aprendan nuevas conductas. Después, por costumbre, no lo volverán a hacer. Lo que sí me preocupan son los grandes inversionistas extranjeros que vienen a explotar nuestros recursos y nos dejan todos contaminados. Esos son los que realmente me preocupan. El tema del aumento de la temperatura del Pacífico por la implementación de proyectos como Dominga, las termoeléctricas, el daño en los glaciares, con iniciativas como Pascua Lama que, por suerte, gracias a que la población es más consciente,  se han racionalizado o se han tenido evitando desastres como la eliminación del agua. Ese va a ser el gran problema del futuro: la falta de agua en el mundo, ni siquiera la escasez de alimento. El calentamiento global, los proyectos mineros y las productoras de pollos y animales son los principales riesgos para el medioambiente, especialmente estos últimos debido al gran biomasa que producen. El deterioro que provocan es mucho más grave que el tipo que tira una colilla. Eso es un problema de educación, lo otro algo mucho más global y que depende de todos nosotros”.

 

Cifras:

36 son los países que ha recorrido Luis Andaur

2000 inició su carrera profesional en televisión

 

Frases: 

"La población es más consciente y ha detenido importantes proyectos contaminantes"

"Me gusta lo que hago y nunca voy a cambiar este sistema de vida"

"Me desagrada que los programas de viajes se conviertan en moda"