Club Deportes La Serena enfrenta las revanchas con la misión de mejorar su rendimiento

Deportes La Serena y O’Higgins de Rancagua inician esta tarde, en el Estadio La Portada, la tanda de revanchas de la temporada oficial en Primera División, cuyos objetivos se presentan disímiles luego de lo hecho en la primera rueda de quince compromisos.

La cita en el césped papayero llega luego e un receso que dejó para ambos los duelos de Copa Chile con realidades también diferentes, ya que los granates quedaron en el caminos ante la Universidad de Concepción, mientras que los rancagüinos doblegaron en los duelos de ida y vuelta a Fernández Vial.

En esta vuelta hay mucho en juego y eso lo tienen claro los entrenadores de ambos cuadros, ya que el local, que es dirigido por Pablo Marini, tiene claro que la primera exigencia es escapar de los dos descensos directos, mientras que los celestes, entrenados por Mariano Soso, en un octavo lugar de la clasificación, van en busca de un puesto de copas internacionales.

A las exigencias del día a día que tendrán los equipos con la cantidad de minutos que deben cumplir con los juveniles, problema que no afecta mayormente a los Papayeros, Marini tiene claro que no se puede quedar con una amenaza de mejorar los rendimientos, sino que debe concretar el alza que se espera, entendiendo que quedarse en zona peligrosa lo hará jugar con una pesada mochila. 

La Serena no se equipó como Universidad Católica, que lo ha hecho hasta los dientes, solamente incorporó al atacante argentino Federico Andrada, quien podría estar hoy en la convocatoria y se espera que no sea poco, ya que en un plantel corto, tener seis bajas como le ocurre hoy a Marini, es un problema mayúsculo. Ciertamente con el ariete proveniente de Atlético Tucumán, el conjunto serenense espera cubrir su urgencia de gol, evidenciaba en sus 19 tantos, aunque están en búsqueda de un par de defensores que lleguen a darle consistencia a una defensa que en Copa Chile volvió a mostrar su ingenuidad y errores.

Esas bajas, tres de ellas por suspensiones (Herrera, Erbes y Fernández), más Valencia, Cavallaro y Cortés, lesionados, restan oportunidades al deté trasandino, que apela a la madurez de sus jugadores entendiendo que “debemos mejorar muchísimo”, como señaló su técnico, visiblemente crítico con el rendimiento de sus jugadores tras las dos derrotas con los del campanil, apelando, en parte al orden, la comodidad y el alza del rendimiento individual y colectivo de sus jugadores que mostraron antes del receso, precisamente en esos primeros tres partidos con el trasandino al mando.