POR DESPIDO INJUSTIFICADO

Los detalles de la demanda del ex gerente Martín Ossandón contra CD La Serena

El ex funcionario del club, que dejó de trabajar en la tienda serenense en febrero pasado, solicita en la acción judicial el pago de más de 400 millones de pesos.

Las últimas semanas de tranquilidad que se han vivido en CD La Serena, producto de la buena campaña que viene cumpliendo el equipo que dirige Juan José Luvera, se vio truncada ayer al conocerse la millonaria demanda que presentó el ex gerente del club Martín Ossandón, desvinculado de la institución en febrero pasado. En la acción judicial, el profesional dejó claro que en su salida hubo irregularidades.

La demanda por despido injustificado, nulidad del despido y cobro de prestaciones e indemnizaciones laborales, establece que no existen formalidades legales en el proceso y que por diversas variables se le adeudan cifras millonarias.

Según consigna radio ADN, Ossandón en su acción jurídica, exige que Deportes La Serena debe pagarle $418.365.222 referidos con dineros que se le debían otorgar por el 5% de los ingresos del club en los últimos 4 años, lo que ascendería a $339.299.762.

También exige porcentajes de los traspasos de los ex jugadores del club Lucas Fasson y Joaquín Montecinos, como también una contribución de solidaridad por los derechos de formación de Diego Valencia, lo que se traduce en montos por percibir de 80.353 euros y 725 dólares.

Ossandón se desempeñó como gerente del cuadro papayero entre los años 2020 hasta febrero del 2023 y, solicita que ante los dineros que se le adeudan, la ANFP retenga los montos que le corresponden al equipo por la televisación de sus encuentros. 

Finalmente Ossandón, quien no respondió a los llamados de diario El Día en la tarde de ayer, hace referencia al desempeño que tiene en el club el representante de jugadores, Fernando Felicevich, explicando que cuando se incorpora a la institución en el año 2020, se entrevista con él para ejercer como gerente general y que, entre sus actividades, era parte de un grupo en el que, junto a Cristian Contador y Daniel Behar, representantes del directorio, desarrollaban gestiones comunicacionales en las cuales sólo Contador era la figura visible.