Buscan recursos para estudio de prefactibilidad

Esta es la propuesta para tratar y reutilizar aguas residuales tras la escasez en la región

Se trata de una iniciativa que se trabaja al interior del Comité Hídrico Técnico de la Región de Coquimbo en conjunto con la empresa pública, Econssa S.A., y que busca poder dotar a La Serena-Coquimbo y, eventualmente a Los Vilos, con plantas de tratamiento de aguas servidas
jueves 01 de diciembre de 2022

A raíz de los graves efectos que la escasez hídrica ha generado en la región, es que durante este año, por iniciativa de la Delegación Presidencial, se creó un comité técnico hídrico, cuyo objetivo es abordar los desafíos y evaluar acciones y soluciones para hacer frente al impacto de la sequía.

Conformado por funcionarios técnicos y profesionales de diversas instituciones del Estado relacionados con el tema, se pensó como una instancia para buscar diversas alternativas y proyectos que vayan en la dirección de mitigar las consecuencias generadas por la falta de agua y de paso, que ayuden a la región a adaptarse a una situación de desertificación que ya es considerada como permanente.

Bajo ese contexto es que una de las iniciativas que hoy se busca impulsar desde esta instancia en conjunto con otros entes estatales es el reúso o reciclaje del agua, tanto servidas como las denominadas “aguas grises”.

Una de ellas precisamente, es aquella en que, en conjunto con la Empresa Concesionaria de Servicios Sanitarios, Econssa S.A., empresa de la Corfo, se propone la construcción de plantas de tratamiento y reciclaje de aguas servidas para la conurbación La Serena-Coquimbo, y Los Vilos.

Al respecto, Darío Valenzuela, secretario ejecutivo del Comité Hídrico Técnico de la región, comenta que esta iniciativa nace a partir de los numerosos encuentros que se han realizado con ejecutivos de la empresa pública en la región, como seminarios, exposiciones y actividades relacionadas, siempre en torno a la gestión y cuidado del agua.

Pero sobre todo, es el actual trabajo en conjunto que Econssa está llevando a cabo con la sanitaria Aguas Antofagasta en esa ciudad nortina, lo que motiva a proponer un proyecto semejante para la región.

 

“Se trata de un proyecto de tratamiento de ‘aguas negras’ en esa ciudad para el negocio del reúso de esa agua, y que por lo tanto, aporta a la economía circular contra el cambio climático, y con respecto a las aguas industriales que requieren las empresas mineras ubicadas al interior de esa región”, expresa Valenzuela.

En ese sentido agrega, “nos enviaron desde la empresa una minuta técnica en la cual, en base a la experiencia que ellos tienen en Antofagasta, incluye una descripción y resumen de lo que consiste poder realizar un estudio de prefactibilidad para las plantas que se requieren en La Serena, Coquimbo, y eventualmente, en Los Vilos, indicando los montos presupuestarios de ese eventual estudio de prefactibilidad”.

Ello incluye explica, tanto la localización posible de las plantas de tratamiento, como la ingeniería básica necesaria y el estudio de demanda para la reutilización del agua.

“Nosotros como comisión hídrica lo que buscamos es interactuar, articular, facilitar y cooperar a que el sector público pueda tomar decisiones y pueda ver oportunidades de inversión, en este caso a través de un importante estudio, que tiene un costo de entre 350 a 450 millones de pesos, dependiendo de si se ingresa o no el emisario para la comuna de Los Vilos”, puntualiza Darío Valenzuela.

 

Es preciso señalar que, en relación a la cantidad de agua que se podría tratar y reusar, la proyección realizada por Econssa - sólo para la zona de La Serena-Coquimbo, y tomando información reportada por la sanitaria Aguas del Valle en su Plan de Desarrollo del año 2018 - contempla un caudal descargado vía emisario submarino para el año 2022 de 1.000 L/s y para el 2032 de 1.200 L/s unificando los emisarios de Coquimbo, La Serena y Algarrobito.

Una cantidad de agua que no es menor pues, según explica el seremi de Medio Ambiente, Leonardo Gros, “esto es similar a la cantidad de agua que proyectan usar algunos proyectos destinados a la desalación que están en discusión hoy en día. Es un volumen que por ejemplo, abarcaría toda la demanda hídrica del valle del Elqui en términos agrícolas. O que perfectamente pueden abastecer parte de la demanda hídrica que tienen las empresas industriales mineras”.

En efecto, la autoridad agrega que el reciclaje de aguas negras puede ser parte de la recarga que se puede hacer a los afluentes en la parte baja del río Elqui, como la zona de Alfalfares, o servir como agua industrial para Teck de Andacollo, o recargar el acuífero de Pan de Azúcar, basado en la calidad de aguas para el riego. Pero estos no serían los únicos efectos positivos que tendría un proyecto como éste.

Ello, porque una iniciativa de estas características permitiría descontaminar las bahías de Coquimbo y de Los Vilos, generando espacial aporte en la calidad de las aguas de mar, mejorando la  garantía y seguridad para los productos bentónicos, mitílidos, algas, peces y la biota marina, como también, para  las concesiones marinas de las caletas de Guayacán, Peñuelas y San Pedro, así como, de la playa Changa.

“No podemos seguir tirando ese tipo de agua al mar y menos agua que tiene contenidos contaminantes hacia bahías que son de enorme importancia para nosotros, pues nos permiten sostener actividades como el turismo o la pesca”, afirma el seremi.

En ese sentido, Gros se mostró “muy contento” por el hecho de que Econssa “se haya abierto a la posibilidad de trabajar en una idea como ésta, tal como lo está haciendo en otros territorios el país, y así se pueda dar inicio a estudios que nos permitan en el mediano plazo poder reutilizar las aguas servidas”.

 

Desde la comisión hídrica del Consejo Regional en tanto, su presidente, el consejero Darwin Ibacache, sostuvo que por estos días se encuentran revisando varios proyectos sobre reutilización de aguas grises y negras, así como nuevas formas de captación de agua.

Sobre la iniciativa de reciclaje de aguas servidas, Ibacache sostuvo que como Consejo Regional, “siempre vamos a apoyar toda iniciativa que vaya en poder generar nuevas fuentes de abastecimiento y uso del recurso hídrico, y eso siempre va a contar con el respaldo del consejo”.

Al respecto, Ibacache sostuvo que ésta o cualquier otra iniciativa semejante “se tiene que hacer a la brevedad posible. Tuvimos un año de fortuna por llamarlo así, con una lluvia relativamente normal, pero llevábamos varios años de sequía. Entonces según los informes que nosotros tenemos como comisión de parte del Ceaza, nos indica que estamos viviendo una fase de desertificación del territorio”, comentó.

Ante esta urgencia pues, es necesario, asegura el secretario ejecutivo del comité hídrico regional, Darío Valenzuela, que todos los actores que toman decisiones políticas “lo puedan conocer y así, tomar la mejor decisión posible en ese sentido”.