Tras accidente que provocó la muerte de cuatro caballares

"Nos cansamos de llamar": Indignación ante riesgo latente de caballos sueltos en las calles

Los habitantes del sector oriente de La Serena indican que sólo surge la preocupación sobre esta situación cuando ocurren hechos de gravedad. Esto pese a la legislación que faculta a Carabineros la posibilidad de ordenar el retiro de los animales.
miércoles 25 de enero de 2023

Tras el grave accidente de tránsito que se registró este domingo en la ruta a San Ramón, en las cercanías del colegio International School, donde un conductor impactó a cuatro caballos, los que posteriormente murieron, los vecinos del sector esperan que un hecho de estas características no se vuelva a repetir.

Si bien, el conductor resultó prácticamente sin lesiones, su vehículo quedó con serios daños producto del accidente. Pero la historia puede haber sido otra porque pocos se explican la salvada milagrosa ante la magnitud del impacto.

En ese contexto, los habitantes de los sectores de El Milagro, San Joaquín y Serena Oriente sostienen que en reiteradas oportunidades han denunciado sobre la gran cantidad de animales, como vacas y caballos, que deambulan libremente por el sector, pero no han conseguido que nadie se haga cargo de forma definitiva de esta situación.

En ese sentido, Iris Araya, vecina del sector de San Ramón, señala que junto a un grupo de vecinos llamaban siempre para alertar a carabineros sobre la gran cantidad de caballos que circulan por la calle y que esto podría generar un accidente.

“Nos cansamos de llamar, ellos nos decían que poco pueden hacer ante esta situación. Vinieron un par de veces, pero como los llamados eran casi todos los días, se aburrieron y nunca más aparecieron por estos lados. Es hora que se ponga fin a este problema”.

Para uno de los conserjes de los condominios ubicados en las faldas del Cerro Grande, el tema de los animales sueltos es algo cotidiano. Afirma que muchas veces es una verdadera caballada que superan los diez ejemplares, aunque reconoce que el problema también se genera por la velocidad en que transitan algunos conductores.

“Nosotros lo único que hacemos es sacarlos del interior del condominio, no sabemos a quién pertenecen. Muchas veces entran por detrás del sector de Huachalalume”.

Reitera que los conductores de igual manera deben tener precaución con la velocidad porque en cualquier momento puede cruzarse un animal en la ruta.

“Más en estos sectores en que lo urbano con lo rural están casi juntos, existen muchas parcelas y las poblaciones están al lado. Una mala combinación”, agregó.

En ese sentido, Carolina Contreras, presidenta de la Junta de Vecinos del sector El Milagro 4R, señala que esto es una problemática de años y que ha sido muy difícil establecer quienes son los dueños de los animales que andan sueltos en la vía pública.

“Aparte del rol que cumplimos denunciando, no podemos hacer nada si la autoridad no se hace cargo. Esto se ve en toda época del año y son de tres a diez animales los que andan sueltos comiendo en las plazas o antejardines”.

Contreras sostiene que es urgente que se controle, no a los animales, sino a los dueños que permiten que estos deambulen por estos sectores.

 “Esperamos que las autoridades se organicen y puedan hacer algo, porque nosotros lo único que podemos hacer es advertir a los vecinos donde transitan los animales”.

¿Pero quién debe hacerse responsable de estos animales en las vías? La respuesta obvia es sus dueños. Pero éstos son los primeros en desaparecer cada vez que sucede un hecho de la magnitud de lo ocurrido el pasado domingo.

Porque son ellos los que les permiten salir para que los equinos y vacas busquen sus alimentos en las propiedades cercanas o porque no tienen en buenas condiciones los cercos, lo que facilita su escape.

Además, si ocurre algún accidente, lo más seguro es que no se hagan cargo de algo, como tener que pagar o que se les pueda cobrar una multa.

NO HAY OBLIGACIÓN

Desde el Servicio Agrícola Ganadero sostienen que no es obligación de los dueños de caballares tenerlos con una identificación, por lo que se hace complejo poder saber a quién pertenece.

Al respecto, el director regional (s) del SAG, Jorge Mautz explica que los bovinos tienen la obligatoriedad de estar identificados a través de un Dispositivo de Identificación Individual Oficial (DIIO) que tiene registro en el SAG y a través del cual se puede realizar una identificación y trazabilidad del animal.

“Sin embargo, en el caso de los equinos no existe una normativa que solicite la obligatoriedad de registro o inscripción, por lo que queda a criterio del propietario su registro. En estos casos, estos pueden ser identificados a través de un chip, el cual permite identificar al animal, a su dueño y predio en el cual se encuentra. No obstante, lamentablemente esta práctica de identificación aún no es tan utilizada por los tenedores de este tipo de animales”.

Mautz afirma que como SAG recomiendan siempre tener la debida identificación de éstos, dado que permite tener un adecuado registro del ejemplar e incluso evitar delitos como el abigeato.

CATASTRO

Al respecto, Gonzalo Arceu, jefe de seguridad municipal de La Serena, sostuvo que se encuentran en estos días realizando un recorrido por las majadas detrás del Cerro Grande, para hacer una georreferenciación de estos lugares, verificar y tomar contacto de algunas personas que tienen caballos.

 “En cuanto a los animales fallecidos, nadie ha ido a reclamarlos y creemos que no va a aparecer. Es complicado saber a quién pertenecían y estamos también esperando si el dueño del vehículo va a hacer alguna acción judicial”.

Arceu explica que los vecinos siempre apuntan a una persona que vive en la quebrada de Tierras Blancas, el que ha sido multado en reiteradas oportunidades por esta situación, aunque él culpa a las personas que cortan sus cercos para acortar camino y por ese lugar se escaparían los animales.

“Lo fuimos a buscar y según él no son sus caballos, ya que les cortaría el pelaje de la cola para identificarlos. Fiscalizamos sus corrales, pero no tenemos forma de saber si eran de su propiedad los caballos muertos“.

Gonzalo Arceau aclara que cada vez que reciben un aviso de vecinos, ellos van y arrean los caballos hacia la zona de la quebrada de Tierras Blancas,

“También hemos habilitado un corral en los terrenos de la exCordep, donde los dejábamos mientras contactábamos a los dueños”, señaló.

LEGISLACIÓN

En cuanto a qué autoridades deben abordar el asunto y poner una solución a esta circulación de animales por las rutas o calles, la legislación del tránsito es clara en indicar que Carabineros tiene las facultades legales para requisar a los animales sueltos en la vía pública y entregarlos a los tribunales. A su vez, los municipios pueden rematarlos si nadie aparece a reclamarlos.

En ese contexto, el artículo 165 de la Ley de Tránsito prohibe dejar animales sueltos o amarrados en forma que pudieren obstaculizar el tránsito, agregando que el cruce de animales de uno a otro lado de la vía solo podrá hacerse en lugares autorizados y previamente señalizados.

La norma señala que los dueños u ocupantes de predios con acceso a las vías públicas deben mantener en buenas condiciones los cercos y puertas para evitar la salida del ganado, como asimismo que el arreo de animales por los caminos nacionales solo podrá efectuarse con el permiso de la autoridad correspondiente.

La Ley sobre Organización y Atribuciones de los Juzgados de Policía Local, en tanto, otorga a éstos la facultad de ordenar el decomiso de las especies, materia del denuncio, como sanción asociada a las infracciones a la Ley de Tránsito.

Por su parte, y sin perjuicio de lo establecido en la Ley 18.290, los municipios pueden incluir en sus ordenanzas locales disposiciones orientadas a dar solución a este problema.

El abogado Rodrigo Aracena, sostiene que en cuanto a las sanciones, la Ley de Tránsito en su artículo 200, que se refiere a las infracciones o contravenciones graves de tránsito, contiene una norma específica que describe como una infracción grave “mantener animales sueltos en la vía pública o cierres en mal estado que permitan su salida a ella”. Más allá de ello, no existe otra norma nacional especial que regule específicamente esta materia.

Sí existen ordenanzas municipales que entregan sanciones y multas al respecto. En la comuna de La Serena está vigente desde el año 2016, cuando fue aprobada por el concejo municipal y se castiga con 5 UTM.

En ese contexto, Aracena sostiene que, no obstante, en general se puede decir que esta materia puede quedar comprendida dentro del sistema de responsabilidad extracontractual que contempla nuestro Código Civil y que sobre el particular dispone que el dueño de un animal “es responsable de los daños causados por éste, aun después