En Coquimbo

No van más: En tres días desalojan cocinerías en las afueras de Parque O"Higgins

Fiscalizadores y policías inspeccionaron los locales de venta de comida, avisando a sus trabajadores que deberán dejar la calle, en el marco del Plan de Recuperación de Espacios Públicos. La noticia fue recibida con molestia por parte de los vendedores.
jueves 16 de marzo de 2023

Una tensa jornada de fiscalizaciones se vivió ayer en las “cocinerías” instaladas al costado del Parque O’Higgins, en Coquimbo. Como habían adelantado las autoridades hace semanas, el lugar fue considerado como uno de los nuevos puntos a intervenir en el contexto del Plan de Recuperación de Espacios Públicos, que coordina la Delegación Presidencial en la conurbación.

En concreto, se trata de locales comerciales de venta de comida, que a lo largo del tiempo han ido creciendo y hoy atienden a decenas de personas, pero que no cuentan con permisos para funcionar ni tampoco con resoluciones sanitarias para el expendio de alimento. Así todo, ofrecen variadas cartas, principalmente de productos del mar, en instalaciones cada vez más elaboradas.

 “No hemos notado que existan resoluciones sanitarias que aprueben que ellos pueden estar acá y (las personas) se exponen a enfermedades de contaminación alimentaria. No hay una cadena de frío, ni tampoco acceso al agua potable. El vertimiento de los desechos se está haciendo también de manera irregular, por lo que nuestra aspiración es que esto sea devuelto a toda la comunidad de Coquimbo”, explicó el director del Departamento de Seguridad Pública de la Municipalidad, David Díaz.

En la misma línea, el delegado presidencial, Rubén Quezada, indicó que “desde ningún punto de vista, ningún particular puede aprovechar los espacios que son de todos para su beneficio propio y es por esto que hemos iniciado una serie de estrategias para ir ordenando de manera progresiva. Pero llega un momento en que es necesario generar mayor intervención, mayor fiscalización y si es necesario, copamiento y recuperación de espacios”.

En la oportunidad, los comerciantes fueron inspeccionados por funcionarios municipales y las policías, quienes procedieron a multarlos y notificarlos de la irregularidad en la que se encuentran y por la que deben dejar las calles.

“La delegación presidencial evacuó órdenes de notificación respecto de la prohibición de funcionar en este lugar, ya que no cuentan con los permisos respectivos. Carabineros está notificando respecto de estas resoluciones y estos  lugares tienen tres días hábiles para retirar sus cosas”, informó desde el lugar el comandante Héctor Canales, subprefecto de los servicios de la Prefectura Coquimbo.

A la pregunta de El Día si es que no hacen caso de la orden, el uniformado confirmó que “efectivamente, si no se retiran del lugar después de tres días hábiles, podrán ser desalojados”.

LA RABIA DE LOS VENDEDORES

Las  fiscalizaciones comenzaron por calle Borgoño, que hasta la intersección con Avenida Costanera, está copada por estas cocinerías. Los comerciantes, al notar la presencia de los fiscalizadores y policías, temieron lo peor y reaccionaron con molestia.

A gritos, increparon a los funcionarios, alegando la falta de conversaciones por parte de la municipalidad para llegar a dicha instancia y exigiendo la presencia del alcalde Ali Manouchehri o alguno de sus jefes de división.

“Vamos a dar la pelea hasta el último. Nos desalojan y mañana nos volvemos a instalar, aunque nos instalemos con una carpa”, indicó una de las trabajadoras en medio de las fiscalizaciones, quien luego declinó dar declaraciones a El Día.

En el lugar, otro de los comerciantes, Gabriel Adaros, entregó su visión a la prensa.

“Deberían darnos una solución como corresponde, con agua, con luz, algo higiénico. Nadie se ha acercado, dónde está el alcalde acá, sólo manda a sus ‘perros’. Le hago un llamado al alcalde Ali Manouchehri a que se acerque a nosotros, a hablar con la gente, mande a su gabinete o arme una mesa de trabajo, porque lo único que han hecho todo el tiempo es (cursar) partes, partes y más partes. ¿Cómo vamos a llegar a un acuerdo si no se acercan?”, cuestionó.

“SE NOS PROMETIERON MUCHAS COSAS”

Del lado de la Costanera y mientras los fiscalizadores avanzaban, conversamos con Yerko Cofré, vocero de parte de los vendedores de las cocinerías, quien también fue duro con el municipio. “A nosotros se nos ha mentido desde el día uno”, indicó.

Según relata Yerko, las cocinerías están divididas en dos grupos, uno que “está dispuesto a hacer lo que sea por no moverse de acá” y otro, que representa, “que ha estado siempre dispuesto y ha trabajado desde el día uno con el municipio”.

“Sabemos que estamos ocupando un lugar que no es nuestro”, comenzó reconociendo el dirigente, para detallar una serie de promesas que, afirma, no se han cumplido.

“Se nos ofreció un terreno donde trasladarnos. En diciembre tuvimos la última reunión, en la que el compromiso fue que nosotros trabajáramos enero y febrero tranquilamente, para que pudiéramos hacer unas ‘lucas’ e irnos a este terreno, ambientado y todo el tema. Pero en una reunión hace un par de días atrás, se nos dice que ya no existe terreno, ya no hay ayuda, no hay nada. Nosotros hemos estado trabajando durante un año con el municipio. ¿Para qué? Para que hoy nos notifiquen de un desalojo. Sabíamos que se venía, estábamos conscientes, pero resulta que hace unos días se nos cierran las puertas y nos dicen que no hay ninguna ayuda por parte del municipio”, declaró.

En ese sentido, también emplazó al jefe comunal.

“Exigimos que el alcalde nos dé la cara, porque ya tuvimos una primera reunión donde nos ofreció muchas cosas. Tenemos grabaciones, fotos, videos, donde tenemos la certificación de que es así, que a nosotros se nos prometieron un montón de cosas y ahora se nos está cortando las manos, y eso no corresponde”, sentenció.