CD La Serena busca deté

La Primera B es la segunda categoría en importancia en el fútbol profesional de Chile. No es la más dura, no obstante, su grado de complejidad queda de manifiesto con la realidad que enfrenta CD La Serena. Militar en esta serie para los granates, apenas cumplida la primera mitad del Apertura, marca todo un reto en este 2013-2014, asumiendo que hace menos de un año militaban en la serie de Honor. 

Desde que La Serena descendió a fines del 2012 bajo la dirección técnica de Marcelo Caro, ha transitado por el mundo de las tinieblas, la inseguridad, los problemas administrativos y la poca certeza del camino que viene, en un día a día que en lugar de darle bríos, los ha sumado en la desesperanza y el ahogo económico.
Su futuro no es halagüeño y su rumbo incierto en la cancha, con una plantilla estructurada bajo ningún parámetro técnico, ha obligado a los mismos directivos a terminar con el trabajo de su actual entrenador Sergio Carmona, quien, en un principio, tras dar unas señales que era posible avanzar en materia de resultados, simplemente no fue capaz de obtenerlos.
Esto último llevó a la desesperación de los actuales timoneles del club, quienes olvidaron sus declaraciones de comienzos de año, viéndose enfrentados a la búsqueda del reemplazante en la banca, en medio de una estructura que no tiene definición y que está condicionada a quien sea capaz de asumir bajo el ofrecimiento económico del momento, toda vez que entre la danza de nombres que se mencionan para sucederlo, no existe un perfil que unifique criterios.
El presidente del club, Mauricio Peyreblanque, sostuvo reuniones en las últimas horas en la capital de Chile con el exdeté de los granates, Fernando Vergara, quien dio una negativa disfrazada en un “conversaremos después”, como también otros entrenadores, algunos que iniciaron una cesantía como Dalcio Giovagnoli, ex Rangers de Talca, cuya mayor particularidad ante el vigente Sergio Carmona es tener mayor experiencia en los primeros equipos, no obstante, sus líneas programáticas marchan por veredas muy distintas y trayectorias que no garantizan que en La Serena todo puede cambiar.
Peyreblanque planteó en Santiago que a Carmona se le comunicó que como club buscarán a su reemplazante. Sin embargo, se mantendrá en el cargo hasta que llegue su sucesor, “era mejor decirle lo que había resuelto la dirigencia, porque los resultados no llegaron y el equipo necesita salir de donde está, es una pena, porque en lo personal le tengo un gran afecto a Sergio, pero esto también está sujeto a los resultados y no se han dado como los esperábamos”, explicó.

La norma de alejarlo de manera condicionada del primer equipo, otra más de las extrañas decisiones que se han adoptado en la testera serenense desde que se precipitó el descenso, genera la lógica incertidumbre, ya que además de estar sobre aviso, tendrá además -hasta este momento- la responsabilidad de parar el equipo en el partido clásico ante Coquimbo del 19 de octubre.
No se trata de cualquier choque (de hecho lo único que ha ganado Carmona ha sido un clásico Copa Chile), se trata del cotejo más esperado por los hinchas de la tienda granate y no desean mirarlo con liviandad, ya que condicionarse otra fecha a estar en el fondo de la clasificación no resulta estimulante, asumiendo que si se quedan con esa victoria, será un golpe a la confianza de la misma plantilla como del deté, sabiendo que este tendrá que volver a sus labores en el fútbol formativo.