El clásico 115 terminó empatado en La Portada
Se acercaba la hora del partido más importante de la región y cientos de hinchas seguían sin poder entrar al recinto cuando el juez Patricio Blanca dio inicio a una nueva edición del “Clásico de la Cuarta Región”, siendo el cuadro pirata quien tomaba la iniciativa durante los primeros minutos, manteniendo la posesión del balón, complicando al dueño de casa, que no mostraba una propuesta clara y debía replegarse en su propio campo. Ya a los 10 minutos de empezado el partido, Coquimbo Unido se había creado varias ocasiones, pero estuvieron poco finos en la definición al arco de Elías Hartard.
Pocas jugadas de riesgo
En el transcurso de los minutos, el escenario comenzó a cambiar. El cuadro granate empezó a encontrarse en la cancha y se fue recuperando, tomando mayor posesión del esférico y a los “Piratas” les costó volver a lo que venían mostrando, ya que el mediocampo serenense les cortaba las salidas e impedía que descargaran el balón en los delanteros Leonardo Monje y Juan Manuel Tévez. Después del cuarto de hora de la primera mitad, el juego se ralentizó y se volvió muy conservador. Se vieron pocas ocasiones de gol y los equipos no se arriesgaron mucho buscando el arco rival y se dedicaron más a estudiarse mutuamente que a buscar instancias para romper la paridad. Sólo en el cierre del primer tiempo llegó lo más destacado para los locales con un cabezazo de Nahuel Oviedo en la que el portero aurinegro Franco Cabrera evitó la apertura del marcador.
En el complemento, fue La Serena quien tomó la iniciativa tratando de hacerse valer en casa, obligando a los aurinegros a esperar el contraataque para sno dejar flancos abiertos a la saga papayera. Ya Deportes La Serena estaba volviendo a mostrar ese juego con el que derrotaron a Santiago Wanderers y se clasificaron a la segunda ronda de la Copa Chile. La idea siempre fue intentar, con la esperanza de que ese ansiado gol llegara tarde o temprano, y tras hacerse el difícil, exactamente a la hora de partido, cayó el primer tanto del encuentro, inclinando la balanza hacia el equipo serenense. El nuevo refuerzo Jorge Aquino recibió un centro tras el casi autogol del Mauro Aguirre, tras quedar solo en la zona de castigo y remató una derecha certera para batir a Cabrera. La Serena se estaba quedando con el Clásico al aventajarse por la mínima.
El gol papayero lejos de sentenciar el cotejo, lo abrió más, puesto que los pupilos de Juan José Ribera salieron a buscar el empate, con más ganas que fútbol, pero eso a esa altura no importaba. Los clásicos son así, simplemente se ganan o se pierden. Aun así, no generaron demasiado peligro, salvo la jugada en la que tuvo el empate en los pies de Juan Manuel Tevez, pero el portero Elías Hartard lo impidió con los pies. Por lo que se estaba viendo en los pastos del estadio La Portada, el gol de Aquino iba a ser el definitivo del partido y teñiría el 115 completamente de Granate.
Pero los Clásicos rara vez se sentencian de manera tan temprana y ésta no fue la excepción. Cuando el partido estaba en lo último, en el primer minuto del agregado, el balón abandonó el campo y salió para el tiro de esquina. El recién ingresado, el experimentado Francisco Arrué, quien cumplió ayer 39 años, pidió la pelota para reanudar el juego. Pateó un centro inclinado para la izquierda y la esférica se cerraba hacia el segundo palo de Hartard, siendo interceptada por Tévez, quien la remató, dando un rebote, el cual quedó para la cabeza de Leonardo Monje quien la dirigió lejos del alcance del golero papayero, para desatar la fiesta de la hinchada pirata, el ver a su equipo arrebatándole la victoria a su clásico rival sin haber mostrado un gran juego. Quedaban dos minutos, aun así, el 1-1 acabó siendo definitivo y obligó a repartir puntos en La Portada.
Deportes La Serena dejó escapar, de esta forma, su primer triunfo en el campeonato, sumando su primer punto y en la próxima fecha visitará a Deportes Iberia. En tanto, Coquimbo Unido se mantiene invicto y ahora espera a Ñublense en el puerto.
