El 34% de los establecimientos en la región no cumple con las normas de la "Ley de etiquetado"

Tanto en locales de expendio de alimentos como en los establecimientos educacionales se han encontrado faltas en las diversas fiscalizaciones realizadas por la autoridad sanitaria.
domingo 31 de julio de 2016

A un mes de la entrada en vigencia la Ley 20.606 de Composición Nutricional de los alimentos y su Publicidad, en la Región de Coquimbo se han realizado 23 fiscalizaciones a diversos establecimientos, 15 de expendio de alimentos, como supermercados y almacenes, y 8 a los quioscos saludables de los colegios. 

De estas inspecciones se han iniciado cuatro sumarios sanitarios en locales de ventas de productos, específicamente por no presentar el rotulado de alerta “Alto en Azúcares” y la misma cantidad de sumarios a quioscos escolares por vender productos envasados que contaban con etiquetas de alerta. Cabe recordar que la normativa prohíbe vender cualquier producto envasado que cuente con alguna de estos rotulados de alertas en los colegios.

El seremi de Salud, Rosendo Yáñez señaló que en la región se hace un balance positivo y que estos ocho sumarios, que son mínimos en comparación a otras ciudades, da cuenta que la ciudadanía está asumiendo el tema de la malnutrición por exceso como un tema de salud grave que está en nuestras manos minimizarlo.

“Estamos muy conformes con el supermercado, porque la industria antes ya estaba haciendo todo el proceso de cumplir con el etiquetado. También en los colegios hay una muy buena voluntad respecto a los quioscos saludables”.

Francisco Chávez, gerente general de supermercado Unimarc en la Región de Coquimbo, que fue fiscalizado en su sucursal de calle Balmaceda en La Serena, señala que implementar esta normativa ha sido un trabajo en conjunto de todo el equipo, ya desde hace varios meses. “Hemos tenido que ajustar procesos, estar involucrados con los equipos en un 100% para llevar a cabo esta normativa que impacta directamente en la salud de las personas y con la cual tenemos que estar en línea”.

A nivel país se han realizado 518 fiscalizaciones, cursando 256 sumarios sanitarios, de los cuales 112 son a establecimientos escolares y 144 a locales comerciales.

CAMBIO DE PARADIGMA. Para el seremi Rosendo Yáñez, lo importante es que esta normativa es sólo el primer paso a un cambio de paradigma frente a la alimentación saludable. Agrega que en nuestra región es donde más se producen en Chile muertes por enfermedades cardiovasculares, cánceres y obesidad infantil, es por ello que se necesita mayor fiscalización y un trabajo desde la primera infancia para lograr revertir este problema. Agrega que la industria ha cumplido, etiquetando todos los productos que están por sobre el nivel permitido de los cuatro elementos en riesgo para la salud con los rótulos de alerta como en “Alto en” azúcares, calorías, sodio o grasas saturadas, pero falta mayor apoyo de la comunidad.

Para la autoridad es vital que los padres y la comunidad educativa colaboren en no enviar colaciones a sus hijos que contengan estas etiquetas negras y que las convivencias escolares sean saludables, “porque el que compra la colación es el padre y apoderado, entonces queremos que sean colaciones saludables o que tengan la menor cantidad de logos posibles. La actividad dentro de los colegios como kermesse o convivencias deben ser sanas”.

Yáñez explica que como la normativa no incluye a los locales comerciales que están cerca del perímetro de los establecimientos escolares, es necesario el compromiso de alcaldes y candidatos a alcaldes para conseguir ordenanzas que prohíban la venta en estos almacenes, tal como ocurre en la comuna de La Granja en la Región Metropolitana. 

“Nos interesa que el entorno sea saludable alrededor del colegio, porque no sacamos nada con estar haciendo un esfuerzo dentro del colegio y afuera estar vendiendo alimentos no saludables”

Por último, hizo un llamado a los parlamentarios para subir impuestos a los productos no saludables como bebidas azucaradas y snacks. Esto porque en el año 2013 México era el país en Sudamérica que lideraba el consumo de estos alimentos, pero aumentaron la tasa impositiva en un 35% y con ello dejaron este triste primer lugar a Chile.

El objetivo final es que con esta ley y un cambio de mentalidad de todos los protagonistas, en los próximos años los productos no presenten estas etiquetas de alerta y sea un plus, tal como lo está siendo en diversos alimentos que destacan no poseer estos logos negros.

Con ello, asegura Yáñez que se terminará también el miedo de productores y dueños de quioscos saludables en los colegios de disminuir sus ventas, estos últimos incluso han señalado que sus ventas han disminuido entre un 30 y un 70%. 

“Si nuestra comunidad se empodera y empieza a exigir que tengan menos sellos, el productor se verá favorecido y también los quioscos, porque si el padre se concientiza y el niño aprende que no debe consumir estos productos, lo más probable es que al vendedor le irá mucho mejor”, concluye Yáñez. 5201