Nueva ley que reemplaza al Sename potenciará los derechos y la rehabilitación de los menores
El 2 de agosto del año pasado fue ingresado a la Cámara de Diputados el proyecto de ley que separa las labores y competencias del Servicio Nacional de Menores, SENAME, mediante la creación de dos nuevas entidades: el Servicio Nacional de Protección de la Infancia y la Adolescencia, y el Servicio Nacional de Responsabilidad Penal Adolescente.
El primero, tendrá como misión la protección y restitución de los derechos que han sido vulnerados. En cambio, al segundo se le encomendarán las labores de responsabilización penal y rehabilitación de los adolescentes infractores de la ley penal.
Al respecto el seremi de Justicia de la Región de Coquimbo, Gregorio Rodríguez Jaure, destacó el avance del proyecto de ley en la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia de la Cámara de Diputados, donde se analizan los artículos referentes al futuro Servicio Nacional de Responsabilidad Penal Adolescente que dependerá de la cartera de Justicia.
Recordó que el 20 de marzo recién pasado fue aprobado en dicha comisión el artículo 14 de la normativa legal, que especifica las atribuciones que tendrán los directores regionales del futuro organismo.
“Los cambios que plantea la normativa legal son importantes desde la perspectiva de atención a los niños y adolescentes que actualmente son parte del Sename, pues crea dos organismos independientes especializados y abocados a la atención de los niños y adolescentes con áreas de trabajo bien definidas. Con esto se gana especialización en las funciones atendiendo el fin superior del niño consagrado en la Convención sobre los Derechos del Niño”, afirma Rodríguez.
La autoridad asevera que el Servicio Nacional de Responsabilidad Penal Adolescente tendrá como objetivo “administrar el sistema de responsabilidad de adolescentes con infracciones a la Ley Penal”, de tal forma que “los adolescentes que hayan infringido la ley no queden impunes porque la impunidad le hace mal a ellos mismos y a la sociedad”.
Destacó que el nuevo organismo quedará a cargo, además, de rehabilitar y reinsertar a los jóvenes, en su familia, en la educación, el trabajo y en la sociedad.
Por otro lado, el Servicio Nacional de Protección de la Infancia y la Adolescencia tendrá por objetivo prevenir los abusos, las vulnerabilidades y promover los derechos de los menores de edad que no cuenten con una familia que se haga cargo.
“Este nuevo servicio garantizará que todos nuestros niños tengan la posibilidad de poder crecer en un ambiente sano”, sostuvo Gregorio Rodríguez, al paso de adelantar que el servicio se hará cargo del sistema de adopción de los pequeños.
CREACIÓN DEL SENAME. Desde su creación en 1979, el Servicio Nacional de Menores, SENAME, ha concebido su acción desde una perspectiva tutelar entregando las prácticas asistenciales necesarias a los menores que se encuentran en una situación irregular mediante dos labores distintas. Por un lado, se encarga de la restitución de los derechos de niños, niñas y adolescentes vulnerados y, por otro lado, la responsabilización y reinserción social de los adolescentes infractores de ley.
Además, todas sus prestaciones, salvo las Oficinas de Protección de Derechos, están ligadas directamente a los tribunales de justicia. Así, por ejemplo, los niños en riesgo social que son atendidos por Sename han sido enviados directamente por los juzgados de Familia.
Para cumplir con estas obligaciones la institución cuenta con centros de atención directa y con una red de colaboradores acreditados, que postulan con proyectos a licitaciones públicas.
Sin embargo, la concepción de la infancia y la adolescencia ha cambiado sustancialmente en las últimas décadas, evolucionando desde un modelo tutelar hacia un enfoque de garantías y protección de derechos.
El Comité de los Derechos del Niño, un órgano de expertos que supervisa la aplicación de la Convención sobre los Derechos del Niño, en su “Compilación de Observaciones Finales sobre países de América Latina y el Caribe período 1993 - 2006”, señaló textualmente: “Si bien toma nota de que está previsto reformar el Servicio Nacional de Menores, el comité observa con preocupación que actualmente el Sename aún tiene a cargo tanto a los niños que necesitan cuidado y protección como a los que tienen conflictos con la ley, y que los servicios sociales no están suficientemente descentralizados”. Por tal motivo, recomendó al Estado de Chile establecer dos sistemas claramente separados.
