RESUMEN 2012: El impacto por la muerte del alcalde del pueblo

Finalmente un cáncer al estomago le costó la vida al carismático alcalde de Coquimbo. Fue despedido por una comunidad que se despobló y en medio del reconocimiento de todos los sectores. En lo político provocó un vacío en la DC y la Concertación a menos de un mes del cierre de las inscripciones de los candidatos para las elecciones de octubre.
RESUMEN 2012: El impacto por la muerte del alcalde del pueblo
RESUMEN 2012: El impacto por la muerte del alcalde del pueblo
lunes 31 de diciembre de 2012

JUNIO 16. El Alcalde de Coquimbo Oscar Pereira ingresa a la Clínica Elqui en La Serena para someterse a tratamiento médico en su periodo de vacaciones. Desde su entorno llamaron a la tranquilidad. Lo definieron como una operación de rutina y programado. Buscaba lograr un fortalecimiento de su salud para enfrentar la dura campaña municipal que se aproximaba y donde enfrentaría a José Sulantay y Moira Navea. Sin embargo, en su círculo más estrecho había preocupación. Estaban conscientes que el ingreso a un recinto de salud era el resultado de un evidente deterioro de su salud.
El 6 de julio buscaron enviar una señal de normalidad. En la Iglesia San Pedro se organizó una misa para orar por su recuperación. En medio del oficio religioso por los parlantes del templo se escuchó la voz del propio alcalde Pereira que se encontraba en clínica. “Doy gracias a los vecinos y funcionarios del municipio por asistir y organizar esta misa, espero estar pronto con ustedes y seguir trabajando en conjunto de forma solidaria por la gente y para sacar adelante.. hay Pereira para rato”, dijo el edil generando fuertes aplausos de los asistentes. Y también llanto. Aunque el hecho fue valorado por sus incondicionales, también fue criticado por sus detractores. Se acusó una utilización de su imagen.
Cuando todos pensaban que este mensaje era un claro síntoma de su recuperación, a las 05: 10 de la madrugada del 6 de julio se anunciaba su deceso. Coquimbo se paralizó. Amaneció de luto. Lo que siguió fue una serie de homenajes y reconocimiento al alcalde del pueblo como se le bautizó. Sus restos fueron velados en el estadio Francisco Sanchez Rumoroso del puerto de Coquimbo luego de una homilía en la iglesia San Pedro. Dejaba de existir a los 62 años tras una larga enfermedad. Uno de sus deseos en vida es que si algo le pasaba quería quedar en el cementerio de Coquimbo. Es por ello que contra el tiempo se levantó un mausoleo donde finalmente fue sepultado. Fue el segundo alcalde que fallecía en ejercicio. En octubre de 2004 se produjo el deceso de Marcelina Cortés, la alcaldesa de Andacollo.
Su muerte generó reacciones transversales. De todos los sectores políticos valoraron su figura y legado.
“Hoy vemos partir a un hombre que se entregó de lleno al servicio público con humildad y compromiso”, precisó el alcalde de Rio Hurtado, Gary Valenzuela.
El reconocimiento también fue expresado por el Ministro del Interior Rodrigo Hinzpeter, quien se encontraba en la zona. “Habíamos estado hace algún tiempo con el alcalde de Coquimbo plantando árboles.. me entregó la camiseta del equipo de sus amores, Coquimbo. Me echó tallas”, planteó el secretario de Estado.

EL LEGADO DE LA TRANSVERSALIDAD
Una de las características de Pereira fue su transversalidad política. De hecho, mucho de sus logros los consiguió gracias a su muñeca política. “Se no ha ido un grande. El pueblo de Coquimbo llora a su alcalde”, admitió consternado el entonces intendente regional, Sergio Gahona.
El ex alcalde de Coquimbo, Pedro Velásquez y actual diputado, aseguró que más allá de las diferencias políticas, “que tuvimos, que nunca fueron de fondo, nos unían muchas cosas. Cuando yo salí del municipio por el tema judicial creí que era la persona que me podía reemplazar. Puedo decir que junto al senador, Jorge Pizarro no nos equivocamos”, planteó Velásquez.

EL KARMA EN SILENCIO
Aunque lo querían mantener en reserva el estado de salud del alcalde de Coquimbo, Oscar Pereira siempre fue tema en el ámbito político. Cada vez que el edil era internado reaparecían las críticas a su salud y la conveniencia que se alejara del cargo. Incluso, en diciembre de 2008 se había filtrado que había fallecido.
Las dudas se acrecentaron con más fuerza de cara a las primarias de abril. Cuando faltaban dos semanas el concejal del PPD, Ramón Velásquez se despachó duras declaraciones
Velásquez sostuvo que el edil “es una persona que está muy enferma y que le ha mentido a la comunidad sobre su estado de salud. Creo que él debería dar un paso a un costado”.
La DC reaccionó indignada, “lo que ha dicho Velásquez es falso, además traspasa el límite de lo aceptable, porque jugar con la vida de una persona me parece de una falta a la ética”, sentenció el diputado Matías Walker. El senador Jorge Pizarro, calificó de una “bajeza” las declaraciones de Ramón Velásquez sobre Pereira. “Lo que ha planteado Velásquez en Coquimbo es una bajeza porque uno puede tener diferencias, pero caer tan bajo lo único que hace es descalificarse asimismo”.
El legislador agregó que una persona “que emite esos juicios no puede pensar el día de mañana ser la autoridad de la comuna y con mayor razón habrá mucho más gente que va a votar por el alcalde Pereira para que no exista la más remota posibilidad de ser alcalde en el día de mañana”.