Afectados por cierre de colegio Cedin estudian acciones contra el sostenedor

sábado 05 de enero de 2013

Si bien los apoderados del colegio especial saben que no pueden detener el cese de funcionamiento, están buscando una compensación por los perjuicios que les causó el repentino anuncio.

Hace un año que Alexandra Araya tiene a su hijo de 7 años en el Cedin de La Serena. En este poco tiempo, el pequeño ha logrado tener grandes avances en su condición. “Él antes no hablaba, era como un animalito. En cambio ahora puede decir sí, no o mamá. Por eso el cierre del colegio me hiere, a raíz de esto decidí no llevarlo a otro establecimiento, porque no sé cómo lo van a tratar”, detalló. El sentir de esta mujer refleja el estado emocional de los padres de los cerca de 100 niños que se quedaron sin colegio por la decisión de cierre del recinto que tomó el sostenedor Raúl Araya Rojas.

Es por esto, que luego de que un grupo de apoderados se reuniera con el diputado Marcelo Díaz se planteó la posibilidad de entablar acciones judiciales en contra de la sociedad educacional por el sorpresivo cierre de la institución. “Sabemos que no podemos detener el cierre del establecimiento, pero lo único que pedimos es que se nos dé un año para poder encontrar otro colegio para nuestros hijos. Ellos son especiales y no podemos decirles que de un día para otro irán a otro establecimiento”, explicó Osmán Núñez, uno de los apoderados.

Por su parte, el diputado Díaz precisó que se van a cumplir dos compromisos que hizo con los padres. “Ya hablamos con el intendente Mario Burlé para que el Ministerio de Educación, por medio de la Seremía, los acompañe en la búsqueda de otro establecimiento y, en segundo lugar, vamos a evaluar iniciar alguna acción legal contra el sostenedor por esta decisión que fue comunicada de manera tardía y carente de transparencia”, precisó.

La última frase del legislador se debe a que cuando se dio a conocer el cese de funcionamiento del Cedin el sostenedor dijo que era porque el Ministerio de Educación estaba solicitando mejoras a la infraestructura, petición que el seremi, Julián González, dijo que no existió.

Lo que se reafirma con la carta que fue enviada a los domicilios de los apoderados en que se indicó que el cierre del recinto se debe a un “cambio de destino del local”.

 

OTROS TESTIMONIOS. Edith Navea es abuela de Diego, uno de los estudiantes que se quedó son matrícula para el 2013. Para esta mujer la situación es preocupante, pues tras su arribo a La Serena hace dos años el niño pasó por colegios especiales donde no fue atendido de la mejor manera. “En el Cedin mi nieto tenía ganas de ir, tuvo muchos avances, por eso me da pena e impotencia que el colegio cierre. Las tías eran excelentes y ahora he visto un retroceso, Diego sólo ve televisión y no hace nada más, porque sabe que ya no vendrá”, afirmó.

Georgina Romero, madre de Alex, también es reticente a cambiar a su hijo del Cedin. Es que ya tuvo dos malas experiencias en colegios con integración. “Cuando él entró era un niño limítrofe, cuando salió tenía deficiencia mental leve. Sin embargo, cuando él estuvo acá nosotros vimos avances, cambios. Incluso el colegio nos lo recomendó un médico”, manifestó.

La madre sostiene que lo más preocupante es cómo enfrentará su hijo un nuevo cambio. “Cómo se le dice a un niño que se cuide porque en el colegio le pueden pegar”, finalizó.

A su vez, Diario El Día intentó conocer la versión de las autoridades del establecimiento educacional, pero su sostenedor declinó referirse públicamente sobre el tema. 4101i