en Illapel

Proyecto El Espino duplica el promedio nacional al incorporar un 30% de mujeres en faenas mineras

Testimonios de trabajadoras dan cuenta cómo la oportunidad que les brindó la empresa les cambió la vida junto a sus familias.
lunes 15 de enero de 2024

Dayana González (22) es de Illapel y estudió Operación en Maquinaria Pesada en la comuna de Los Vilos. Tras egresar, entusiasmada, se dio a la tarea de buscar una práctica profesional que le permitiera aplicar lo aprendido en las aulas. Lamentablemente, durante seis meses no obtuvo resultados positivos. Las respuestas que recibió fueron “no tenemos las condiciones para tener trabajando a una mujer aquí”, “no podemos dejar trabajando a alguien sin experiencia”, “no contamos con gente para capacitarte”, entre otras.

El caso de Dayana es una muestra de lo que sucede con muchas mujeres que tras estudiar una carrera vinculada a la minería, o siendo técnico o profesional del área, no encuentran oportunidades laborales que les permitan desarrollarse en dicho rubro productivo.

Pese a que la incorporación femenina en la minería aumentó en Chile de un 7.1% en 2011 a un 14.8% el 2022, y a un 15.2% el año pasado, según datos del estudio de Representación de la Mujer en el Sector Minero en Chile de la Comisión Minera del Cobre (COCHILCO), y antedecentes aportados por el Seminario de Sostenibilidad ESG APRIMIN “Desarrollo Sostenible en los Proveedores: Desafíos y Oportunidades”, organizado por la Asociación de Proveedores Industriales de la Minería, respectivamente, aún es grande la brecha para equilibrar las oportunidades de trabajo para las mujeres respecto de los hombres en el sector minero.

Pero el panorama que presenta en este ámbito el proyecto El Espino, que ejecuta la Sociedad Punta del Cobre (Pucobre) en Illapel, se desmarca de los índices nacionales. Desde la empresa de mediana minería aseguran que la incorporación femenina en sus faenas alcanza a un 30%, doblando el promedio del país.

Consciente de que pertenecía a una familia de escasos recursos y que su madre debía sustentar sola las necesidades de ella y sus dos hermanos menores, Dayana trabajó en un restaurante, una librería, panadería y ferretería mientras soñaba con conseguir una práctica para iniciar su camino profesional. Cuando menos lo esperaba, desde el proyecto El Espino de Pucobre la llamaron para darle la oportunidad que estaba esperando. Luego de tres meses de formación teórica y muchas horas práctica en el simulador de conducción, finalmente la joven pudo operar un camión articulado real de 40 toneladas en El Espino. A ese logro se sumó que, desde septiembre de 2023 fue contratada como operadora en el proyecto minero.

“Me sentí súper bien acogida en Pucobre y agradezco la paciencia que tuvieron para enseñarme (…) Mi familia está muy orgullosa de mí, al final lo logré y ahora espero ser un buen ejemplo para mis hermanos”, manifestó Dayana González, quien ha conducido camiones de 70 toneladas y, hace poco, pudo operar un vehículo de 100 mil kilos.

El testimonio de María Alejandra Araya (47) emociona. Viuda, nacida en Santiago, es madre de seis hijos y debió sacar adelante sola a su familia. Para ello, durante 15 años enfrentó los prejuicios de ser una mujer que quería trabajar en minería, área que en esa época era dominada exclusivamente por hombres. Luego de un largo recorrido que incluyó trabajar manejando colectivos, buses y ser secretaria en una empresa de camiones, pudo postular al proyecto El Espino.

“Llegué a una prueba. Era primera vez que operaba este tipo de equipos mineros. Me dieron la oportunidad y de ahí no paré más. Ahora soy líder de grupo y soy formadora de las 14 chicas nuevas que llegaron como operadoras a la empresa. A ellas les enseño temas de conducción, de comportamiento de seguridad”, contó.

En cuanto a la recepción que ha tenido en la empresa, María Alejandra Araya destacó que “me he sentido súper valorada y muy protagonista”. Agregó que “durante 15 años estuve estancada, pero en un año en El Espino he crecido de una forma impresionante”. “A mí me costó mucho, golpeé muchas puertas para llegar donde estoy. Enfrenté prejuicios, incluso sufrí de acoso, pero finalmente Pucobre me dio la oportunidad y estoy muy agradecida”, finalizó.

Viviana Pérez (35) es ingeniera en minas y transmite seguridad. Cada vez que se comunica por radio con su equipo sus ideas son claras y convincentes. Ella tiene a cargo la gestión de la flota de carguío, distribuye al personal, lidera la charla de seguridad de cada día al iniciar la jornada, ordena cambios de equipos, deriva camiones a mantención, entre otras tareas. Nacida en Copiapó, va a cumplir cuatro meses desde que llegó a El Espino, en Illapel, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar el cargo de jefe de turno en el proyecto.

“Mi familia está orgullosa de quien soy yo ahora, especialmente porque ninguno de ellos es minero. Además ven que no es una tarea fácil ser líder y que trabajar en minería conlleva riesgos latentes”, planteó. En cuanto a cómo se ha abierto camino en una industria mayoritariamente masculina, señaló que “hoy eso se ha ido rompiendo. Como mujer se me ha hecho fácil porque el equipo de trabajo que se ha formado acá me ha recibido muy bien. Los conocimientos que uno aporta son bien aceptados. El machismo no se ve acá en este proyecto”.

El mensaje de Viviana a las mujeres que quieran incursionar en minería es directo. “Hoy en día podemos hacer lo mismo que los hombres, estamos a un mismo nivel. La idea es que las mujeres se sigan insertando en la minería, siempre con el apoyo de la familia. Podemos convertirnos en un porcentaje cada vez más alto en esta industria”.  

FOTO: Cedida

“Me parece muy bien que el proyecto El Espino de Pucobre tenga dentro de sus trabajadores un gran porcentaje y número de mujeres. Las mujeres estamos preparadas para éste y cualquier desafío. Sólo necesitamos la oportunidad para dar a conocer nuestras competencias y capacidades y estar a la altura de los desafíos que se nos propongan. Sobretodo en estas labores que históricamente han sido desempeñadas por hombres, hoy podemos decir que las mujeres nos hemos tomado esos roles con todas las capacidades y competencias que se requieren para lograr el objetivo”, Delegada Presidencial Provincia del Choapa, Nataly Carvajal. 

“La inclusión de la mujer en la minería permite que los equipos sean más eficientes y sobretodo en la toma de decisiones. Valoramos que más empresas como Pucobre incorporen a mujeres en sus líneas de operaciones y jefaturas, porque estas acciones fomentan que una industria minera sea más robusta, más diversa y más inclusiva”, Seremi de Minería Región de Coquimbo, Constanza Espinoza.