Gremios locales se mantienen en "alerta" por efectos de baja en el precio del cobre

Dirigentes señalan que, de mantenerse esta tendencia, las consecuencias podrían llegar a la zona en el mediano y largo plazo. Lo que más preocupa, indican, es la constante alza en los costos de producción
Gremios locales se mantienen en “alerta” por efectos de baja en el precio del cobre
Gremios locales se mantienen en “alerta” por efectos de baja en el precio del cobre
sábado 04 de mayo de 2013

Las exportaciones de cobre representan el 50% de los embarques totales del país y cerca del 75% de los envíos desde la Región de Coquimbo al exterior. Por ello, para nadie es indiferente la baja sostenida que ha venido registrando el precio del metal rojo en las últimas dos semanas en los mercados internacionales, generada principalmente por la menor demanda por parte de China y la volatilidad de los mercados.
Pese a que en la jornada de ayer registró un repunte en su valor y, tras dos caídas consecutivas, avanzó 3,66% para cotizarse en US$ 3,23049 la libra, los gremios locales señalan que este escenario los mantiene en “alerta”.
Juan Carlos Sáez, presidente del Consejo Regional Minero de Coquimbo (CORMINCO), que agrupa a las principales mineras de la región, señaló que “lo que veo es que tenemos una situación preocupante en este momento, vamos a terminar el año con mayor oferta que demanda de cobre y el próximo año esa diferencia que se produce va a ser aún mayor”.
Eso significa, agrega, “que el precio del cobre va a seguir tendiendo a una baja progresiva”. En este sentido, señala que esta situación se mantendría el 2013, el 2014 y en adelante. “Hay muchos especialistas que en este momento dicen que se acabó el ‘súper ciclo’ de los comodities”.
No obstante, sostiene que, en general, cuando se desarrolla un proyecto minero se hace siempre pensando en el largo plazo “y generalmente los planificadores mineros están acostumbrados a los ciclos del cobre, eso significa que se analiza la tendencia en los últimos 20 años. Creo que hay demanda de cobre en el mundo suficiente para soportar proyectos grandes y medianos”.
Donde sí se generarán problemas para la región, aduce, va a ser con el valor del dólar “porque antes si bajaba el cobre subía el dólar, en este momento esto no está ocurriendo y eso sí que es una señal tremendamente preocupante”.
Por ello, en opinión del presidente de la Corminco, los inconvenientes no van a estar dados directamente por la baja del precio del cobre, que es más previsible, sino que por los costos de extraer el material “y esa es la variable que realmente a gremios como el nuestro nos preocupa”.
A juicio de Sáez, existe en el país un tremendo problema de generación de energía “porque el Estado no ha sido capaz de determinar cómo vamos a suministrar energía para los proyectos industriales futuros y los costos de ésta son de los más altos del mundo, lo que repercute indudablemente en que los proyectos se vuelvan sensibles”.
Un segundo factor de tope, dice, es el precio del capital humano. “Hemos enfrentado durante estos últimos años escasez de mano de obra, pero, además, el costo ha subido tremendamente. Ese costo no va aparejado necesariamente con productividad y eso significa que los márgenes siguen estrechándose”.
“Estos factores son absolutamente atentatorios contra la industria y han hecho que muchos proyectos en este momento estén cuestionando su funcionamiento a futuro y que muchas minas en funcionamiento estén evaluando si efectivamente van a ampliarse o no y eso va a afectar directamente a la región”.
Al respecto, es enfático en señalar que “la mayoría de las empresas de la Corminco ya comenzamos el proceso de ajuste de cinturones, de prepararse para un periodo donde definitivamente pueden venírsenos las ‘vacas flacas’. Va a haber una revisión de qué está pasando con el capital humano, con la energía y, por supuesto, con el agua”.
Una opinión coincidente es la que manifiesta Cristian Martínez, gerente de la Corporación Industrial para el Desarrollo Regional de la Cuarta Región (CIDERE), quien sostiene que efectivamente “existe un grado de ocupación por el tema de lo variable que ha estado precio del cobre y estamos monitoreando los efectos que pudiera acarrear a la región. Ya se está hablando de ajustar de alguna manera los costos”.
Martínez también considera que uno de los factores negativos que tendrá este escenario será el alza en el costo de la producción que esto pueda acarrear. “Se han ido encareciendo los procesos productivos de las mineras a nivel nacional y si baja el valor del metal repercute los costos proyectados de estos procesos productivos”.
Evaluando todos estos aspectos, confirma que sí las empresas están considerando evaluaciones. “Más que una preocupación es estar atentos a cómo se está presentando el panorama mundial en relación al precio del cobre, pero el tema se centra principalmente en los costos de producción”, recalca. 

IMPACTO EN OTROS SECTORES
••• Respecto a si esta baja en el valor del cobre comenzará a impactar en otros rubros como el inmobiliario y el comercio, Juan Carlos Sáez señala que “en forma lenta sí. Nosotros todavía estamos viviendo la bonanza del ‘súper ciclo’, vale decir, hay cientos de miles de personas que han podido aprovechar este periodo de ‘vacas gordas’ haciendo nuevas empresas, pero eso es mucho más a largo plazo”.
En tanto, el gerente de Cidere, Cristian Martínez, sostiene que “los primeros que podrían sufrir un impacto, de alguna u otra manera, serán las empresas prestadoras de servicio, porque con la reducción de costos muchas empresas tal vez opten por disminuir este tipo de contrataciones. En el tema de las proyecciones inmobiliarias, creo que el impacto no se verá en la inmediatez, porque son inversiones a más largo plazo”, sostuvo.